CON LAS “ALAS CAÍDAS”

La falta de empleo en nuestro país genera la migración de muchísima gente a diferentes países, esto genera en los jóvenes la incertidumbre cuando eligen una profesión, cuatro a cinco años estudiando y sacrificando el bolsillo de los padres para que posteriormente al salir  con una determinada  profesión dispuestos a dar el todo por el todo, las empresas u organizaciones te sierran con la puerta en la cara, dando a conocer que no se requiere de personal o que se trabaje sin sueldo por la empresa.

A fines de los 90 y hasta el 2007 más o menos, miles de bolivianos cambiaron de destino en busca de días mejores. Hasta ese momento, Argentina era el lugar preferido, pero con los años  baja económicamente debido a una falsa bonanza, esto hizo que los compatriotas miren a otro lado. Los cochabambinos y cruceños fueron los primeros en hallar una nueva “mina de oro” cuidando a ancianos, trabajando en albañilería o en lo que hallan en España, todas estas personas mandaban dinero con tal frecuencia que sus familiares construían casas, compraban autos y estrenaban ropa con frecuencia, Entonces mas que por pobreza extrema, quienes decidían ir a probar suerte aspiraban a tener cosas que en Bolivia tardarían años en comprar; mientras que en ese país, con un trabajo estable, todo seria mas fácil.

A raíz de esta situación, en el 2007, el espacio Schengen (conformado por 26 países europeos) decidió cerrar sus puertas a los bolivianos y exigir una visa con requisitos complicados de cumplir. Pese a ello, mucha gente siguió emigrando, pero como sucedió en Argentina, el tiempo demostró que el buen momento de la economía española también era una burbuja.

En el 2008, la crisis mundial paso su factura y cayo el mercado inmobiliario, con la consecuente alza del desempleo, entonces los pintores, albañiles plomeros y otros se vieron en la calle. Es así que años antes no se encontraba a un obrero de la construcción, pero ahora ellos fueron los primeros en retornar al país.

Vivimos en un país muy difícil complicado por la falta de fuentes de trabajo la mayoría tenemos el temor de no tener un empleo digno con un sueldo necesario  al requerimiento de nuestras familias.