26 ago 2011

"EL OTOÑO DE LA VIDA"


Hoy 26 de agosto es un día muy especial para los adultos mayores en  toda Bolivia. El 26 de agosto se recuerda el Día de las Personas de la Tercera Edad en Bolivia, establecido por Decreto Supremo 1421 del 17 de diciembre de 1948, durante la presidencia de Enrique Hertzog Garaizabal, donde se establece Principios como el derecho a la asistencia, al albergue, el sustento, al vestido, al bienestar físico y moral, al recreo, al trabajo, al sosiego, a la consideración y a funerales. Muchos de estos derechos se quedan plasmados en un papel porque en Bolivia como en nuestro municipio de Llallagua muchos adultos mayores sufren maltrato por parte de propias familiares, que al no tener paciencia ni tiempo para atenderlos los maltrata y abandona  exponiéndolos a maltratos por parte de la sociedad.
 Les cuento una historia que me ralato una amiga:“Un anciano que por sus características provenía del área rural vestía con escasa ropa, un sombrero muy gastado, sus abarcas estaban casi desechas recubiertas y amarradas  con bolsas de nylon, tenia recubierto con tela uno de sus ojos debido a su ceguera, tenía un bastón en el cual se apoyaba, el anciano diambulaba por el sector de expendio de refrescos en plena vía pública, trataba de comprar un refresco por el intenso calor que hacía, mas las vendedoras se negaban a venderle y lo mandaban de un puesto a otro, el pobre anciano llego hasta un puesto de frutas, donde mi persona realizaba algunas compras, el anciano se me acerco y me dijo véndame refresco , hablándole al anciano trate de llevarlo nuevamente al puesto de refrescos, las señoras nuevamente se negaron a venderle,  porque solo tenía una moneda de 0,50 ctvs. y el refresco costaba  a un peso, este era el motivo por el cual esas vendedoras lo habían mandado de puesto en puesto engañando al pobre anciano exponiéndolo a que sufriera un accidente pues esta calle es transitada por un sin número de vehículos, y el anciano apenas y podía ver… , compre el refresco , se lo di al anciano y este muy consiente trato de pagarme la moneda de 0,50 que alguna buena persona le había dado en caridad, ese día quede muy decepcionada y con una gran tristeza por el actuar de estas personas que no se ponen a meditar que en algún momento de su vida llegaran a esta etapa tan dura que es la vejez o como muchos la denominan el otoño de la vida".


1 comentario: